Información de salud


Si su hijo tiene el síndrome de Guillain-Barré

A su hijo le han diagnosticado el síndrome de Guillain-Barré. Se trata de una enfermedad que afecta los nervios periféricos, por lo general los nervios sensitivos y los nervios motores. Con menos frecuencia, afecta solo los nervios motores o los nervios sensitivos. Los nervios motrices y sensitivos están ubicados en todo el cuerpo. Estos se encargan de trasportar mensajes sobre movimientos y sensaciones entre el encéfalo y la médula espinal y el resto del cuerpo. Si tiene el síndrome de Guillain-Barré, su hijo puede sentirse débil y dolorido. Podría quejarse de tener entumecimiento, debilidad y hasta parálisis en la cara, el pecho o las piernas. El síndrome de Guillain-Barré puede causar problemas graves de salud. Pero la enfermedad por lo general es temporal. La mayoría de los niños se recuperan por completo.

¿Cuáles son los factores de riesgo del síndrome de Guillain-Barré?

Es un trastorno autoinmunitario, es decir, que el cuerpo ataca parte de su propio sistema nervioso periférico. Parece afectar con mayor frecuencia a niños que recientemente han tenido infecciones, tales como un virus o un resfriado. En muy raras ocasiones, el síndrome puede presentarse poco después de que un niño ha recibido ciertas vacunas. Se desconoce la causa del síndrome.

¿Cuáles son los síntomas del síndrome de Guillain-Barré?

Un niño afectado por este síndrome puede tener dolores o debilidades musculares que suelen comenzar en las piernas y se extienden al resto del cuerpo. Puede haber problemas para caminar y hormigueo en las manos y los pies. Los síntomas también pueden incluir parálisis o dificultad para tragar o respirar, que son situaciones de emergencia. El problema puede empeorar de un momento a otro. Por eso es importante buscar atención médica ante los primeros signos.

¿Cómo se diagnostica el síndrome de Guillain-Barré?

Proveedor de atención médica usando un martillo para evaluar los reflejos en la rodilla de una niña mientras una mujer los observa.
Para determinar si su hijo tiene el síndrome Guillain-Barré, el neurólogo realiza una exploración neurológica, que incluye una evaluación de los reflejos y de otras habilidades motoras de su hijo.

Para su diagnóstico y tratamiento, es probable que a su hijo lo atienda un neurólogo pediátrico. Es un proveedor de atención médica que se especializa en los problemas del sistema nervioso en los niños. El proveedor examinará al niño. Le pedirá información acerca de los antecedentes médicos y los síntomas que tiene el niño. También podrían hacerle las siguientes pruebas:

  • Examen del sistema nervioso. Se hace para determinar cuán bien funciona el sistema nervioso de su hijo. Durante el examen, el proveedor de atención médica evaluará la fuerza muscular, el equilibrio, la coordinación y los reflejos del niño. También evaluará ciertas habilidades, como la memoria, la vista, el oído, el habla y la deglución.

  • Punción espinal (punción lumbar). Se hace para evaluar el estado del líquido que rodea el encéfalo y la médula espinal. Este líquido se denomina líquido cefalorraquídeo. Durante esta prueba, se adormece la piel de la parte baja de la espalda (zona lumbar). Luego, se introduce una aguja en el conducto vertebral, con el fin de extraer una muestra del líquido. El líquido se analiza en un laboratorio para ver si hay indicios de infección e inflamación.

  • Estudio de la conducción nerviosa y electromiografía. Estas pruebas evalúan el funcionamiento de los nervios y de los músculos. Por lo general, se realiza primero el estudio de la conducción nerviosa. Durante este estudio, se adhieren a la piel unos pequeños discos circulares conectados a unos cables, llamados electrodos, a lo largo de las vías de ciertos nervios. Los electrodos registran la rapidez con la que los músculos y los nervios responden a un estímulo eléctrico. Para la electromiografía, se colocan unos pequeños electrodos de aguja en diversos músculos de los brazos o de los pies. Se registra la actividad eléctrica de esos músculos mientras su hijo los contrae y los relaja.

  • Análisis de sangre. Podrían realizarse para determinar si hay indicios de infección.

  • Diagnóstico por imágenes. En ocasiones se necesita una resonancia magnética o una tomografía computarizada para descartar otras afecciones. La resonancia magnética a veces sirve para detectar si hay inflamación en las raíces nerviosas.

  • Pruebas de función pulmonar. Se realizan para medir la fuerza de los músculos respiratorios.

Es importante recordar que es frecuente que en las primeras etapas del síndrome de Guillain-Barré, los resultados de los análisis den valores normales. Entonces, el diagnóstico se basa principalmente en la historia clínica del paciente y una exploración física. 

¿Cómo se trata el síndrome de Guillain-Barré?

  • No existe una cura para este síndrome. Es posible que desaparezca por sí solo al cabo de algunas semanas. Pero el tratamiento puede ayudar a acortar la duración de la enfermedad.

  • Si su hijo recibe tratamiento, lo atenderán en el hospital hasta que se alivien los síntomas.

  • Quizás se realicen algunos procedimientos. Por ejemplo, la plasmaféresis o la administración de inmunoglobulina intravenosa en dosis altas. La plasmaféresis limpia la sangre de determinadas proteínas. La administración de inmunoglobulina implica el uso de ciertos productos sanguíneos especializados para ayudar al cuerpo a combatir la reacción inmunitaria anormal.

  • Además, su hijo podría recibir atención de apoyo para el tratamiento de los síntomas, según sea necesario. Esto puede incluir medicamentos que calman el dolor de los músculos o de los nervios. O puede tratarse de asistencia con la alimentación o la respiración.

  • La duración total del tratamiento depende de cada niño. El proveedor de atención médica le explicará las demás posibilidades de tratamiento, si es necesario.

¿Cuáles son los problemas a largo plazo?

La mayoría de los niños se recuperan del síndrome de Guillain-Barré sin problemas duraderos. El período de recuperación podría ser de apenas unas semanas. O podría llevar hasta unos años. Y prácticamente 1 de cada 3 de esos niños todavía puede tener síntomas después de la recuperación. En un 3 % de los niños, los síntomas pueden regresar muchos años después de haberse presentado la enfermedad por primera vez. 

© 2000-2024 The StayWell Company, LLC. Todos los derechos reservados. Esta información no pretende sustituir la atención médica profesional. Sólo su médico puede diagnosticar y tratar un problema de salud.
Powered by Krames by WebMD Ignite